En este blog ya nos hemos referido en distintas ocasiones a que existen evidencias concluyentes para la gestión remota de pacientes (Remote Patient Monitoring, RPM) relativas a la efectividad en resultados de salud y al ahorro de costes.
A las pruebas acumuladas ahora se viene a sumar una extensa investigación sobre la bibliografía existente, que se publicaba en junio de 2016: Telehealth: Mapping the Evidence for Patient Outcomes From Systematic Reviews.
El autor de este estudio es el Pacific Northwest Evidence-based Practice Center (EPC) y fue encargado por la Agency for Healthcare Research and Quality del U.S. Department of Health and Human Services a iniciativa del senado de Estados Unidos.
Su objetivo ha sido revisar de forma exhaustiva toda la literatura científica relacionada con la telemedicina, para generar un mapa de evidencia que permite sacar conclusiones sobre los diferentes usos actuales de la telemedicina, entendida ésta como “el uso de las tecnologías de la información y las comunicaciones en la prestación de servicios de salud a pacientes alejados en la distancia y/o el tiempo de los prestadores de dichos servicios”.
Su valor diferencial radica en que se han tenido en cuenta más de 1.400 artículos científicos y los resultados se han generado a partir de 58 revisiones sistemáticas de la literatura, lo que supone el manejo de un volumen de información sobre esta área de conocimiento no alcanzado anteriormente. Varios son los usos de la telemedicina que han sido valorados: la gestión remota de pacientes, los servicios de comunicación y consejo sanitario, el uso de la telemedicina en psicoterapia, la teleconsulta (entre profesionales sanitarios) y la telerrehabilitación, entre otros. Y, en función del foco clínico, las principales aplicaciones estudiadas han sido las enfermedades cardiovasculares, la diabetes, las enfermedades respiratorias, condiciones pluripatológicas, rehabilitación, trastornos del comportamiento y dermatología.
Los números del estudio son espectaculares, porque si se suman los pacientes estudiados en los distintos artículos tratados en esta revisión superan los 250.000 en el total de artículos y los 45.000 en el caso de la gestión remota de pacientes.
En la siguiente figura se puede ver un resumen del mapa de evidencia resultante:
El estudio concluye que ya hay abundante evidencia hoy en día para confirmar la efectividad de la telemedicina. Se demuestra que se han conseguido resultados positivos y repetibles en el tratamiento de patologías crónicas y trastornos del comportamiento. Y se indica que la gestión remota de pacientes y los sistemas de comunicación y consejo sanitario (en relación a las patologías crónicas), y la telemedicina aplicada a la psicoterapia (en el caso de los trastornos de comportamiento), cuentan con una base sólida de evidencia que demuestra su efectividad, por lo que se recomienda encaminar futuros estudios hacia su implantación a mayor escala y promover la eliminación de las barreras para su generalización.
Imagen: pedromf
Fuente de los gráficos: Telehealth: Mapping the Evidence for Patient Outcomes From Systematic Reviews